Si hay algo que me gusta de viajar son los trayectos. Disfruto meciéndome en un tren o viendo pasar las «panoramic», que nos diría un taxista búlgaro en Veliko Tarnovo. Supongo que por eso uno de mis viajes soñados y pendientes es recorrer la famosa 66 americana sin más objetivo que disfrutar de la música y el paisaje mientras avanzamos en el coche. Me imagino que mi mente desconectará de tal modo que seré feliz. Así como lo lees. Hay momentos en los que eres excepcionalmente feliz. Feliz porque te rodea tal cantidad de belleza que no puedes sino sentirte plena. Esa sensación me acompañó en más de un trayecto en nuestro viaje a Bolivia el pasado año.
Os dejo un video con lo rescatable del poco material que tengo de nuestro viaje. Las imágenes pertenecen al trayecto que realizamos de Sucre a Potosí en el coche compartido de Diego, de la compañía cielito lindo, con dos Australianos y su iPod cargado de buena música. Fueron 3 horas de carretera, rock y unos paisajes maravillosos ascendiendo de sucre a Potosí.
Otras son desde la «plaza» Huayna Cápac en la cima de la isla Incahuasi en el Salar de Uyuni, y un poco del mercado campesino de Sucre y la abuela de Rodrigo.
Bolivia 2013 from Elisa Diaz on Vimeo.
No tengo imágenes pero confieso que el cielo más bello que he visto por ahora fue desde la carretera Potosí-Uyuni. Casi podíamos robar las estrellas de lo cerca que estaban.